La naturaleza de la distribución general de carga está cambiando constantemente, con un cambio de paradigma en el comportamiento del consumidor. Ya sea que operen a larga distancia, dentro de la ciudad o localmente, y ya sea que transporten alimentos, aparatos eléctricos o carga mixta, las empresas de distribución han tenido que adaptarse a las nuevas tendencias para mantenerse competitivas.
Con la confianza del consumidor y el sector minorista en crecimiento en todo el mundo, y el comercio electrónico ejerciendo más presión sobre los servicios de distribución, la necesidad de ser puntual, flexible y eficiente nunca ha sido mayor.